¿Quién era en realidad Sharon Marshall? Esto reveló el documental de Netflix
La Chica de la Foto (2022) se estrenó en Netflix y el documental nos dejó impactados con la historia de Sharon Marshall, una joven cuya muerte desató fuertes revelaciones de su pasado.
Dirigida por Skye Borgman, la producción comienza presentándonos a Tonya Hughes, una bailarina exótica cuyo cuerpo fue localizado en la calle pero, al tratar de contactar a sus familiares, sus amigas se dieron cuenta que algo no estaba bien.
Conforme la noticia llegó a los medios, se fue revelando que Tonya era un nombre falso y algunos allegados confirmaron que en realidad se trataba de Sharon Marshall.
A través de testimonios de sus amigos de la preparatoria, pudimos conocer un poco más a la víctima. Ella era sumamente inteligente y hasta se ganó una beca completa para estudiar en una prestigiosa universidad. Pero su vida también tenía un lado oscuro.
Resulta que en esa época Sharon vivía con su “padre” quien se la llevó a Tampa y se empezó a presentar como su esposo. Tras la muerte de la mujer, el hombre se convirtió en un prófugo, pues secuestró a su pequeño “hijo” Michael (aunque en realidad no tenía ningún parentesco con él).
Cuando la policía investigó se dio cuenta que el tipo también había estado usando nombres falsos y que la historia de Sharon aún no se conocía por completo.
La verdadera identidad de Sharon
El nombre real de la mujer era Suzanne Sevakis. Cuando era muy pequeña fue secuestrada por su padrastro, Franklin Delano Floyd, quien pudo llevársela porque la madre de familia había sido detenida por un incidente independiente al caso.
Una vez que se dio a la fuga con la niña, Franklin comenzó a usar distintos alias para evadir a la ley y, tristemente, comenzó a abusar de Suzanne, aunque no se sabe exactamente hasta qué punto escaló la tortura.
Aunque la madre de la niña trató de denunciar su desaparición, en ese entonces los policías justificaron que –al tratarse de su padrastro– los niños estarían bien, así que el caso no procedió.
El criminal fue aprehendido en 1994 por el secuestro del hijo de Suzanne, Michael, y fue sentenciado a muerte luego de que se encontraran evidencias de que también fue responsable de la muerte de la stripper, Cheryl Ann Commesso.
El hombre nunca fue acusado formalmente por el asesinato de su esposa, pues no había evidencias suficientes para llevar el caso a la corte.
Otro detalle importante es que la verdadera identidad de Suzanne no fue descubierta sino hasta el 2014, cuando los estudios de ADN cobraron más fuerza.